IWMF Fellow Denied Entry into Colombia to Report

On October 1, 2019, Mexican journalist Alejandra Rajal was denied entry to Colombia in advance of a reporting trip for the International Women’s Media Foundation (IWMF)’s Adelante program. The IWMF is deeply disturbed by this violation of press freedom and urges the Colombian government to allow journalists to complete their work without interference.

Upon arrival to Colombia, Rajal was removed from immigration proceedings to be questioned. Authorities detained Rajal for roughly 11 hours, during which time her cell phone – containing information about her reporting projects – was taken and searched without her permission. Colombian authorities then delivered unfounded claims against Rajal, accusing her of entering the country with a lack of resources and of lying about her reasons for entering the country. In addition to these intimidation tactics, the officials searched her belongings, displayed threatening videos, limited her communications and did not provide access to food. During this time, the IWMF was in direct communications with representatives from Migración Colombia, provided documentation corroborating Rajal’s statements to relevant authorities.

Ultimately, Rajal was denied entry to Colombia and sent back to Mexico.

Rajal was chosen as one of 12 outstanding women journalists in a highly selective application process for this fully funded reporting trip to Colombia. Currently in its fifth year, the IWMF’s Adelante fellowship program is a well-established initiative in Latin America funded by the Howard G. Buffett Foundation. To-date, Adelante has conducted five reporting trips to Colombia and 23 throughout Latin America; yet, this is the first and only time a fellow has faced these consequences.

To intimidate and deny entry to a working journalist is to instill trauma, inhibit vital reporting and prevent future career opportunities. The IWMF’s 30-year history has included trips for journalists to some of the most dangerous and challenging places in the world, yet Rajal’s experience is unique. This clear violation of press freedom is deeply concerning, and a somber reminder of the continued challenges women journalists face simply for seeking the truth.


El 1ro de octubre de 2019, a la periodista mexicana Alejandra Rajal se le negó la entrada a Colombia antes de un viaje con fines periodísticos para el programa Adelante de la International Women’s Media Foundation (IWMF). La IWMF está profundamente perturbada por esta violación de la libertad de prensa e insta al gobierno colombiano a permitir que las periodistas completen su trabajo sin interferencia.

A su llegada a Colombia, Rajal fue retirada de los procedimientos de inmigración para ser interrogada. Las autoridades detuvieron a Rajal durante aproximadamente 11 horas, tiempo durante el cual su teléfono celular, que contenía información sobre sus proyectos periodísticos e informes, fue tomado y registrado sin su permiso. Las autoridades colombianas luego presentaron reclamos injustificados contra Rajal, acusándola de ingresar al país con falta de recursos y de mentir sobre sus razones para ingresar al país. Además de estas tácticas de intimidación, los funcionarios inspeccionaron sus pertenencias, mostraron videos amenazantes, limitaron su comunicación y no le aseguraron acceso a alimentación. Durante este tiempo, la IWMF estuvo en comunicación directa con representantes de Migración Colombia y proporcionó documentación que corroboraba las declaraciones de Rajal a las autoridades pertinentes.

Finalmente, a Rajal se le negó la entrada a Colombia y se le envió de regreso a México.

Rajal fue elegida como una de las 12 mujeres periodistas destacadas en un proceso de solicitud altamente selectivo para este viaje de reportaje totalmente financiado a Colombia. Actualmente en su quinto año, el programa de becas Adelante de la IWMF es una iniciativa bien establecida en América Latina financiada por la Fundación Howard G. Buffett. Hasta la fecha, Adelante ha realizado cinco viajes periodísticos a Colombia y 23 en toda América Latina. Sin embargo, esta es la primera y única vez que una becaria ha enfrentado estas consecuencias.

Intimidar y negarle entrada a una periodista que trabaja es infundir terror, inhibir informes vitales y prevenir futuras oportunidades profesionales. La historia de 30 años de IWMF ha incluido viajes para periodistas a algunos de los lugares más peligrosos y desafiantes del mundo, pero la experiencia de Rajal es única. Esta clara violación de la libertad de prensa es profundamente preocupante y un sombrío recordatorio de los continuos desafíos que enfrentan las mujeres periodistas simplemente por buscar la verdad.