IWMF Stands with Mónica Velásquez Villacís and Andersson Boscán
In Ecuador, investigative journalist and 2024 Courage in Journalism Awardee Mónica Velásquez Villacís and her co-worker Andersson Boscán are facing grave danger for their reporting on corruption and international drug trafficking. Their work with La Posta has uncovered significant failures within the Ecuadorian Attorney General’s Office, revealing how these oversights have allowed criminal networks to operate with impunity.
Instead of addressing these critical issues, the Attorney General has launched a public attack against Mónica and Andersson, accusing them of being a “resonance box” for crime. These unfounded allegations have put them in an extremely vulnerable position, to the point where they require protection as “witnesses” from the very institution that is targeting them.
The International Women’s Media Foundation (IWMF) urgently calls for global support to protect Mónica and Andersson. Their situation is a stark reminder of the threats journalists face worldwide. This is not just about two journalists; it is about defending the fundamental right to free and independent media.
We urge global attention and for the international community to stand with Mónica and Andersson. Demand accountability and transparency from Ecuadorian authorities. Advocate for the safety and protection of Mónica, Andersson, and their colleagues.
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Defendamos la libertad de prensa: Apoyemos a Mónica Velásquez Villacís y Andersson Boscán
En Ecuador, la periodista de investigación y galardonada con el Premio al Coraje en el Periodismo 2024, Mónica Velásquez Villacís, junto a su colega Andersson Boscán, enfrentan un grave peligro por sus reportajes sobre corrupción y narcotráfico internacional. Su trabajo en La Posta ha revelado fallos significativos en la Fiscalía de Ecuador, mostrando cómo estas negligencias han permitido que redes criminales operen con impunidad.
En lugar de abordar estos problemas críticos, la Fiscalía ha lanzado un ataque público contra Mónica y Andersson, acusándolos de ser una “caja de resonancia” para el crimen. Estas acusaciones infundadas los han puesto en una posición extremadamente vulnerable, hasta el punto de necesitar protección como “testigos” de la misma institución que los persigue.
La Fundación Internacional de Mujeres en los Medios (IWMF) hace un llamado urgente para obtener apoyo global y proteger a Mónica y Andersson. Su situación es un recordatorio claro de las amenazas que enfrentan los periodistas en todo el mundo. Esto no se trata solo de dos periodistas; se trata de defender el derecho fundamental a un medio libre e independiente.
Instamos a la atención global y a que la comunidad internacional se solidarice con Mónica y Andersson. Exijan responsabilidad y transparencia a las autoridades ecuatorianas. Aboguen por la seguridad y protección de Mónica, Andersson y sus colegas.